Este libro es el camino que recorrí durante años de adicción al alcohol y las drogas; mi experiencia de varios intentos de rehabilitarme sin éxito. Es una confirmación de que, mientras estemos vivos, las oportunidades existen y están ahí al alcance de nuestras manos, solo tenemos que estar alertas y tomarlas. No importa cuántas veces fracasemos mientras nos volvamos a poner de pie, hasta que veamos esa luz al final del túnel, nos aferremos a ella y avancemos.
Otro motivo es poner sobre la mesa este tema que no hace distinción alguna, es 100% transversal, lamentablemente oculto y absurdamente negado en las altas esferas.
En este libro encontrarás principalmente honestidad, vivencias, consecuencias y costos, pero lo más importante es que encontrarás fuerza y te dejará un mensaje: con trabajo, voluntad y perseverancia, reinventarte es tu próximo paso.
Patricia Gomez –
Fabiolita:
Me “devoré” tu libro.
Me encantó!
Es un tremendo aporte.
Mi hija Paty que trabaja entre otras cosas poniendo pellets a alcohólicos quiere comprarte un ejemplar.
Te felicito de corazón.
Eres una gran mujer!
Te admiro…Fabiolita querida!
Richard Latorre M. –
Muy querida Fabiolita
Que libro mas maravilloso!!!
Te felicito desde lo más profundo de mi corazón muy bien escrito, de una sinceridad y verdad que sobrecoge. Muy lindo el relato de tu niñez, adolescencia y adultez (que a veces se confunden) hasta que logras una madurez a fuerza de mucho dolor.
Creo que tu gran terapeuta, siquiatra, sicóloga……que te sacó de este pozo profundo, fué LA COLOMBA, fue el giro final y definitivo hacia tu rehabilitación!!!
Mi admiración más sincera….y esto es para siempre!!!
Luis Latorre Martin –
Recién he terminado de leer el libro “Yo soy una adicta rehabilitada”. Cuando se tiene en sus manos una obra cuya autora es una persona muy querida, cuyo es el caso, se corre el riesgo de restarle objetividad al comentario, pero como tal comentario no tiene otra pretensión que hacerlo dentro del círculo cercano y estrecho de mis primos, aquí voy.
Se trata de un libro escrito con el lenguaje propio de la autora, lo que se agradece mucho cuando se trata de una obra autobiográfica, en que no es menester crear personajes ni situaciones. Para quienes la conocemos tanto, es como escucharla hablar. Para quienes no la conocen, aquel lenguaje directo les permitirá tener la ocasión de acceder a sus pensamientos más profundos y sinceros, ambas cosas, esto es, reflexión y comunicación y acceder al noble propósito de enorme contenido ético y gran calado moral que ella tuvo en vista al escribirlo.
En efecto, cuando relata la forma cómo adoptó la decisión de escribirlo, alude a sus lágrimas de dolor, otras de nostalgia, risas, asombro, pero siempre con verdad (página98). Y salir de nuestro sagrario de la conciencia en beneficio de otros, requiere, desde luego, de una narración absolutamente veraz: no restarle el contenido médico a la poción que se va a ingerir.
Contiene el libro, a mi juicio, frases de bella construcción gramatical, otras de una descripción tan lúcida que permite casi casi dibujarlas, tales como “…ellos me dieron las herramientas para la vida (…) no tuve necesidad de usarlas y por ahí quedaron olvidadas, seguramente oxidadas” (página 23); “…sentía que la vida cada vez me quedaba más grande…” (pagina 42); “otra vez poner mi vida en cajas, desarmarme para rearmarme en otro lugar” (página 53); “Perdí el derecho a defraudar…” (página 69).
Y hace unos minutos, cuando vía whatsapp le comentó a su autora que sus páginas me llegaron al alma, me contesta por el mismo medio remoto “…yo dejé la mía (el alma) en esas páginas”. Eso sucede cuando un libro se escribe o una obra plástica se pinta o esculpe no solamente con el arte, la pluma, los pinceles y el formón, sino que con el corazón: trasciende la obra y salta de un medio a otro.
Solamente me resta felicitar a mi querida prima y a sus hermanas, que fueron artífices de las vivencias que ella supo sortear con tanto éxito.
Con mucho cariño,
EQH
Isabel Cortes –
Me demora una hora en leerlo y la redacción del libro la encontré excelente y muy profundo; potente testimonio muy útil para miles de personas